Luis Gilberto Murillo formó parte de un equipo de investigación en el MIT hasta principios de 2022 que busca soluciones a la crisis ambiental desde una perspectiva afro.
El presidente electo de Colombia, Gustavo Petro, anunció hoy que el ingeniero Luis Gilberto Murillo será su embajador en Estados Unidos -donde reside- a partir del 7 de agosto, cuando asuma el cargo. Es el primer afrodescendiente en la historia de Colombia que ocupa el cargo de Embajador en Estados Unidos.
Murillo fue el candidato a la vicepresidencia por la coalición centrista en la primera vuelta de las elecciones presidenciales del 29 de mayo. Tras su derrota, anunció inmediatamente su apoyo a Petro, líder de una coalición de centro-izquierda, en la segunda vuelta. Petro ganó, lo que supuso un cambio histórico para el gobierno colombiano.
El nuevo embajador, con importantes vínculos en Estados Unidos con los partidos demócrata y republicano, será la voz colombiana ante la administración de Joe Biden en temas que marcan una transformación en las relaciones bilaterales. Los temas clave serán la revisión del Tratado de Libre Comercio y la revisión de la fallida política antinarcóticos. Además, unirán esfuerzos en temas sensibles como el cambio climático y el apoyo de Estados Unidos a la implementación del acuerdo de Paz en Colombia,
Además, supondrá una importante mejora en las relaciones bilaterales, que este año cumplen 200 años. También llega tras los desencuentros con el actual gobierno de Iván Duque, cuyo partido apoyó la reelección de Donald Trump, rompiendo la imparcialidad y el respeto a los asuntos internos,
Murillo fue portada de la edición de AL DÍA del 27 de octubre de 2021.
Nació en el campamento de una multinacional minera que explotaba oro en Andagoya, un pueblo bañado por varios ríos caudalosos en el departamento del Chocó, en el Pacífico colombiano. Es una de las zonas con mayores indicadores de pobreza y abandono estatal de su país. En este entorno, consiguió la mejor puntuación de la región en el examen estatal para estudiantes que terminan el bachillerato. Esto cambió su vida cuando sólo tenía 16 años.
Luis Gilberto Murillo es el primer colombiano y el primer afrolatino que forma parte del prestigioso Programa Martin Luther King del Instituto Tecnológico de Massachusetts (MIT), asignado al equipo de la Iniciativa de Soluciones Medioambientales. Trabajó hasta principios de este año en un proyecto innovador que buscaba ayudar a resolver tanto la pobreza de las comunidades afrodescendientes del continente como el deterioro ambiental y la necesidad de adaptarse al cambio climático.
Murillo tiene 55 años, es ingeniero de minas formado en la Universidad Estatal de Prospección Geológica y Minería de Moscú, a la que llegó becado sin pretenderlo tras los resultados de su examen de bachillerato. La vida le puso en un lugar que nunca había soñado y eso cambió su rumbo.
Regresó a Colombia para trabajar por el Chocó y dirigió la entidad encargada del medio ambiente. Fue gobernador del departamento a los 31 años. Pero un día, en pleno conflicto armado colombiano, fue secuestrado por un grupo paramilitar que le advirtió de lo que podía pasar con su vida. La siguiente decisión de Murillo fue exiliarse en Estados Unidos con su familia hace más de 20 años. Allí trabajó intensamente para dar a conocer las condiciones de vida y las violaciones de los derechos humanos de la población afrodescendiente de Colombia. Logró el apoyo de personalidades como el reverendo Jessie Jackson y sectores comenzaron a apoyar proyectos y acciones en beneficio de las comunidades afrodescendientes afectadas por la guerra.
Entre 2011 y 2018 regresó a Colombia, primero como gobernador del Chocó, luego como gestor de un proyecto del Gobierno Nacional para atender la crisis socioeconómica del Pacífico colombiano, y después como ministro de Ambiente y Desarrollo Sostenible. Formó parte del gobierno del presidente Juan Manuel Santos, que firmó el acuerdo de paz con las FARC-EP en 2016. Regresó a Estados Unidos y desde Washington y Boston, trabajó por la salud del planeta y sus comunidades más vulnerables.